Atapuerca, Sierra de España en Castilla y Leon, provincia de Burgos, en la cordillera Ibérica. En ella se han descubierto yacimientos con restos de homínidos que se remontan hasta hace un millón de años (en el pleistoceno medio), en concreto del homo heildelbergensis y del homo antecesor.Tambien se descubrieron numerosos indicadores climaticos y de la faunay la flora de la época.
Estos indicadores dan a conocer un clima cambiante durante el ultimo millón de años :
- Inicialmente frío y húmedo, con una vegetacion dominada por encinas y robles.
- Un importante enfriamiento hacia la mitad del período,con un cambio en la composicion floristica caracterizado por el aumento del dominio de robles, y un giro, hace unos 200.000 años, hacia una mayor beningnidad climática que facilitó el establecimiento progresivo de una vegetación mediterranea.
La situación geográfica de la Sierra de Atapuerca y su altitud determinan la existencia de un climacontinental atenuado por la cuantía de las precipitaciones y por la influencia mediterránea. La combinación del factor climático con el de la naturaleza del sustrato (con un horizonte calcáreo y suelos poco profundos en la Sierra) dan lugar a una cubierta óptima natural que se define como bosque subesclerófilo. Esta cubierta no supera por lo general los cuatro metros de altura. Se compone mayoritariamente de encinas salpicadas por grupos de quejigos, que proliferan en aquellas zonas en las que aparecen suelos más profundos. El encinar se extiende por las laderas de la vertiente suroeste, dejando ver algunas zonas aclaradas, debidas en la mayoría de los casos a la presencia de la roca caliza en las capas más superficiales del terreno.
Entre las especies de arbustos que crecen en las lindes de los claros o calveros podemos encontrar el espino de tintes, madreselvas el majuelo, el escaramujo y en menor medida endrinos y jazmines silvestres. También aquí aparecen plantas herbáceas como: viuda silvestre, alcachofa borriquera, etc. En las cotas superiores de la Sierra las encinas se disponen formando rodales, que van dejando ganar terreno a una vegetación de escaso porte, formada por tomillos, lavandas y aulagas.
La Sierra de Atapuerca está rodeada por campos de cereales que permanecen roturados durante el invierno y en los que se plantan mayormente trigo y cebada. Son terrenos ácidos, con un desarrollo profundo, generados por el río Arlanzón. Sobre aquellos terrenos que permanecen en barbecho durante todo el año, proliferan desde la llegada de la primavera algunas especies de herbáceas oportunistas, como 'Bromus' y mostacillas.
La Sierra de Atapuerca está rodeada por campos de cereales que permanecen roturados durante el invierno y en los que se plantan mayormente trigo y cebada. Son terrenos ácidos, con un desarrollo profundo, generados por el río Arlanzón. Sobre aquellos terrenos que permanecen en barbecho durante todo el año, proliferan desde la llegada de la primavera algunas especies de herbáceas oportunistas, como 'Bromus' y mostacillas.
Otro ecosistema cuya presencia marca de manera importante a la Sierra es el que se desarrolla en la ribera de río Arlanzón. A lo largo del mismo encontramos un bosque de galería mixto, formado por povedas y sauzales. Los árboles que lo forman son el álamo negro, el álamo temblón y varias especies de sauces. El río forma algunas islas cuyos tamaños y formas cambian dependiendo de las crecidas anuales. En ellas crecen carrizales, formados por varios tipos de espadañas y carrizos, mezclados con diversas clases de juncos. En la orilla, los chopos y los sauces se mezclan con claros en los que crecen pastizales, helechales y juncales. Aquí podremos encontrar escaramujos, mentas y rodales de tréboles. Estas zonas aclaradas se ven favorecidas por la utilización ganadera que se da sobre todo en los meses de verano, así como por el uso lúdico que los habitantes de Ibeas de Juarros hacen del río Arlanzón al paso por su localidad. En algunos puntos de la ribera aparecen además pequeñas manchas de olmos, muy mermadas debido al virulento ataque de la grafiosis
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